Una de las satisfacciones más gratificantes de los voluntarios es poder servir a quienes más lo necesitan y para nuestra ángel voluntaria Carolina Díaz, no bastó con poner en acción su deseo de ayudar en el programa que tiene la Fundación Proyecto Unión para niños, el Hogar Santa Rita de Cascia, sino que reunió los recursos para sorprender con un delicioso almuerzo a los abuelitos beneficiarios del Comedor María es Madre.
En esta oportunidad Carolina asistió al comedor comunitario ubicado en el centro de la ciudad con su esposo, Osmar Gamboa, quien también es voluntario de la fundación con el fin de llevar 150 almuerzos con pollo y chuleta, brindando no solo una buena fuente de proteína para los abuelitos sino también su cariño y amistad.
Gracias a la generosidad de Carolina y Osmar, ángeles voluntarios de nuestra fundación, más de un centenar de abuelitos pudieron saborear un delicioso almuerzo. La voluntad y el corazón de servir a los demás, son acciones ejemplares para nuestra sociedad. “Voluntarios en acción estamos cambiando el mundo”.